Mi escudo y protección es Dios. Los
temores aparecen en cualquier momento de la vida y se requiere fortalecernos en
la fe, pues precisamente el miedo procura derribar la fe del cristiano e impedir
así su avance…
Génesis
15:1 “Después de estas cosas vino la palabra de Jehová a Abram en visión,
diciendo: No temas, yo soy tu escudo, y tu galardón será sobremanera grande”.
El Señor le explica a
Abram porque razón no debe tener miedo: “yo soy tu escudo”, podemos decir algo
así como: “aunque no tengas ejércitos como ellos, ten presente yo soy tu ejército”
o también podemos considerar: “aunque no tengas corona real como ellos, yo soy
tu corona, poder y gloria”.
El término escudo aquí
es traducido de una palabra hebrea que además significa: defensa, arma, protección.
Entonces esto era Dios para Abram (y por supuesto también para cada uno de sus
hijos, él también es nuestro Dios y él no cambia, él nos defiende).
El pasaje también nos
deja ver una promesa: “tu galardón será sobremanera grande”. Al considerar la Biblia vemos que el Señor anima a sus hijos
(esto es ejemplo que los padres debemos imitar), y lo hace de diferentes maneras,
en éste caso en particular Dios promete un “gran galardón” que traducido desde
el hebreo significa: “multiplicación de la recompensa” o “gran salario”. Dios
bendice el corazón fiel.
En el versículo dieciocho nos dice: “Dios hace un
pacto con Abram, diciendo: a tu descendencia daré esta tierra”, vemos entonces
que las bendiciones, galardones y recompensas que el Señor envía, no sólo son
para nosotros sino también para nuestra descendencia. El Señor también tiene en
cuenta a las familias.
Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria. (Mi escudo y protección es Dios).
Te invitamos a leer: "DIOS NO SE EQUIVOCA".
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