El más
importante plan de restauración es precisamente el plan de salvación de Dios
para los hombres. El Señor Dios creó al ser humano a su imagen y semejanza, también
nos dice que le encomendó multiplicarse (el plan de Dios era llenar la tierra con
seres humanos a su imagen y semejanza), le encargó administrar la tierra y el
cuidado de ella.
Por la desobediencia
de Adán y Eva en el huerto, el Señor empieza a desarrollar aquel plan de
salvación para salvación de los hombres. Su deseo es discipular las naciones y establecer
su gobierno en la tierra. El escritor
del evangelio según San Marcos es una evidencia de la restauración y misericordia
divina.
Nos dice la Biblia en Hechos 15:36-38 “Después de algunos días Pablo dijo a Bernabé:
"Volvamos y visitemos a los hermanos en todas las ciudades donde hemos
proclamado la palabra del Señor, para ver cómo están" Bernabé quería llevar también con ellos a Juan, llamado
Marcos, pero Pablo consideraba que no debían llevar consigo a quien
los había desertado en Panfilia y no los había acompañado en la obra”.
La
Escritura nos enseña que Dios restaura al que ha caído. Un siervo de Dios que retrocedió
fue precisamente Juan Marcos. Empezó su formación para servir a Dios al lado de
los apóstoles Pablo y Bernabé, pero a la mitad del viaje misionero decide
devolverse.
La
Biblia no nos dice la razón exacta, probablemente por fatiga, temores, una crisis
emocional, lucha con tentaciones, en fin…). Juan Marcos no desechó su fe, pero estaba
renunciando al llamado divino; era joven y su camino de servir a Dios apenas iniciaba.
Lo más
probable es que al comenzar su servicio al Señor él lo hizo con muchos deseos y
pasión. Como ocurre normalmente con alguien que nace de nuevo y experimenta ese
deseo interior servir a su Salvador. Pero un tiempo después Juan Marcos no
puede continuar. Esta decisión no fue bien vista por Pablo, quien se disgustó.
La Biblia nos enseña que Bernabé
(Según el libro de Hechos 15:36-38) no dejó sólo a Juan Marcos, le enseñó con
amor y mucha paciencia, lo fortaleció para que sirviera a Dios y decide llevarlo
de nuevo a la misión, pero el apóstol Pablo piensa diferente y esa diferencia provoca
la separación entre ellos, así Pablo se va con Silas y Bernabé se va con Juan
Marcos.
Finalmente Dios restauró
a Juan Marcos y lo usa para escribir el evangelio de Marcos, también ejerció el
ministerio pastoral y de maestro. Dios restaura lo que ha sido dañado.
1 Corintios 1:27-29 "Dios ha escogido lo necio del mundo, para avergonzar a los sabios; y Dios ha escogido lo débil del mundo, para avergonzar a lo que es fuerte; y lo vil y despreciado del mundo ha escogido Dios; lo que no es, para anular lo que es; para que nadie se jacte delante de Dios".
1 Corintios 1:27-29 "Dios ha escogido lo necio del mundo, para avergonzar a los sabios; y Dios ha escogido lo débil del mundo, para avergonzar a lo que es fuerte; y lo vil y despreciado del mundo ha escogido Dios; lo que no es, para anular lo que es; para que nadie se jacte delante de Dios".
Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria. (Jesús no rechaza a nadie).
Te invitamos a leer: "VIRTUDES DE UN VENCEDOR".
No hay comentarios:
Publicar un comentario