17.2.17

Virtudes de un Corazon Adorador

Virtudes de un corazón adorador

 VIRTUDES Y EVIDENCIAS DE UN CORAZÓN ADORADOR


Entonces Abraham dijo a sus criados: "Quédense aquí con el asno. Yo y el muchacho iremos hasta allá, adoraremos y volveremos a ustedes” Génesis 22:5.

En éste versículo podemos identificar algunas virtudes de un corazón adorador, veamos:

a) La obediencia: La podemos ver cuando Abraham dice: “yo y el muchacho iremos hasta allá”, el Señor le había dicho que debía ir a la tierra de Moriah y así fue, cuando él vio de lejos aquel lugar, dio orden a sus siervos que lo esperaran y él continuó el viaje con su hijo Isaac. No cuestionó la voluntad divina, ni le pidió explicaciones al Señor, él obedeció, y por esto fue bendecido por Dios.

b) Pasión por Dios: Abraham revela su primera razón para ir hasta aquel lugar: “adoraremos”. Una gran realidad es que cuando la vida de adoración depende del estado emocional de aquel que adora es prácticamente anulada cuando llegan las dificultades. En contraste cuando el adorador aprende que Dios es el mismo en todo tiempo, y que es Todopoderoso adora sin importar la adversidad.

c) La perseverancia: Vemos que después de viajar por 3 días (con Isaac y con sus siervos), Abraham ve a lo lejos aquel lugar y sigue adelante con el viaje, caminando solamente con su hijo, seguramente fue un viaje difícil y duro, por tierra semidesértica, y empieza a subir por aquel monte que el Señor le indica, estaba quizá cansado, pensativo y preocupado por la situación de su hijo, por su familia, y seguro recordaba las promesas de Dios. Pero a pesar de todas estas cosas, Abraham siguió adelante hasta llegar al lugar que el Señor había determinado.

Dios no decepcionó a Abraham pues allí le habló a través del ángel y no tuvo que sacrificar su hijo, pues Dios estaba probando su fe. El Señor no deja en vergüenza a todo aquel que en él cree.  La obediencia, la pasión por Dios y la perseverancia son virtudes de un corazón adorador.  

Te invitamos a leer: “JESÚS QUIERE BENDECIR TU VIDA”.      


Escrito por Pastor Gonzalo Sanabria (Virtudes de un corazón adorador).